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El baño es un sector de la casa denominado zona de servicio
. Pero su función no tiene por qué condenarlo al olvido o al descuido. Cuando está impecable y bien ordenado luce mucho mejor y jerarquiza la vivienda. Por otra parte, ingresar en un lugar pulcro y aseado incide en el estado de ánimo de una manera mucho más positiva. Por todas estas razones te queremos dar algunos trucos para que tu baño siempre se vea como el de las fotos de las publicaciones de decoración. ¡No te los pierdas!
Con el jabón y la humedad las juntas blancas pueden llegar a oscurecerse. Para devolverles la claridad original se pueden repasar con un cepillo de dientes viejo embebido en una solución de agua y lavandina. La misma preparación se puede utilizar para limpiar las juntas de pisos y paredes, con la precaución de usar prendas viejas por si se manchan y destiñen con la lavandina.
Después de bañarse es importante secar cuidadosamente la mampara para eliminar restos de humedad. Así la superficie del vidrio templado lucirá siempre lisa y brillante como la propuesta por el Estudio Tangumax. Estos cuidados son imprescindibles en zonas donde el agua tiene mayor dureza, ya que de otro modo quedarán antiestéticas manchas blancuzcas que afean el aspecto del vidrio. Conviene tener a mano un secador de mano con burlete de goma para facilitar la tarea. Periódicamente se le puede pasar una lija fina al agua para remover las manchas… o directamente elegir una mampara esmerilada.
Para mantener los sanitarios pulcros conviene tener a mano una escobilla sanitaria. La misma se debe utilizar periódicamente para limpiar bien los bordes del inodoro o el bidet. Hay modelos plásticos comunes y otros más elegantes con acabado brillante como el de la imagen.
Dos veces al mes conviene repasar con un plumero los techos y los rincones del baño, además de la parte superior de los muebles y repisas. Para facilitar la tarea se puede tener siempre a mano un banquito o una escalera pequeña.
Los baños blancos son muy estéticos y dan sensación de amplitud, pero tienen el problema de que las manchas se notan demasiado. ¡y qué decir del cabello cuando se cae al piso! Para tener los pisos siempre pulcros conviene tener siempre a mano un lampazo para repasar las baldosas y los rincones.
Las mesadas de granito negro suelen mancharse con facilidad si quedan restos de agua o productos de limpieza. Se manifiestan con antiestéticas manchas blancuzcas que se pueden eliminar frotándolas periódicamente con una lija fina al agua. Para mantener el orden, una mesada con un estante debajo es ideal para guardar las toallas o disponer canastos de mimbre con los artículos de tocador.
Para que la grifería siempre tenga su brillo original conviene repasarla con un rollito de virulana y limpiador en crema. Así se le va haciendo un pulido suave que elimina el sarro y las manchas, devolviendo el fulgor inicial.
Ya que estamos con el tema del baño, te queremos compartir un libro de ideas que te muestra diseños perfectos.
