Eligiendo las cortinas para el salón de casa

Karen Ayerve Karen Ayerve
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Acertar o no en la creación de interiores armoniosos  y elegantes depende, entre otras decisiones, de la elección en el diseño de las cortinas. Un accesorio al que apenas le damos la importancia que merece, a pesar de que en muchas ocasiones puedan llegar a ser las sustitutas de toda una pared, como es el caso de las que visten a los grandes ventanales de casa. 

Elegir las cortinas más favorecedoras no es una misión imposible ni mucho menos un dolor de cabeza, si tenemos en cuenta pequeños detalles como la decoración que hemos elegido para nuestro salón, la importancia que éstas juegan dentro del mismo, y el tipo de ventanas que pretenden cubrir. En cualquier caso, te invitamos a echarles un vistazo a las inspiraciones que desde homify hemos seleccionado.

Motivos florales

Tener grandes ventanales en el salón de casa significa prestar un poco más de atención si cabe al diseño de sus cortinas, ya que el espacio que ocupan es mayor al de las ventanas en sí. Y ya sabemos que cuanto más grande sea el elemento de decoración, más atención recibe por parte de nuestros ojos. Así que lo mejor será aceptar con nuestra elección. Nuestra primera inspiración ha optado por un diseño teñido con motivos frutales -piñas- de lo más arriesgado, pero del todo acertado dentro de la decoración del resto del salón: colores por doquier y estampados que son toda una celebración a la naturaleza. Un detalle a tener en cuenta: reciclar el material que se ha utilizado en la cortina principal para utilizarlo en otros elementos de decoración como cojines o demás persianas de tela. 

El atractivo de los detalles

Las cortinas translúcidas son nuestra mejor apuesta dentro de habitaciones que están en las alturas, ya que al quedar fuera del alcance de cualquier visión del exterior, su transparencia no supondrá un problema. Además, son perfectas si no queremos perdernos ni un solo detalle del paisaje que tenemos fuera, mientras reducimos de manera sutil la luz que entra al salón. El detalle de los topitos en el diseño de la fotografía aporta cierto aire de frescura y atractivo a una decoración más bien clásica.

¡Viva el color!

La casa barcelonesa Kaaten se ha propuesto convertir a nuestras cortinas en ese objeto al que quedarnos mirando embelesados, hasta que llegue a despertar cierta inspiración. Para ello nos regala esta propuesta en color rojo pasión y tela translúcida que deja entrever lo que está pasando al otro lado de las ventanas, sin perder, en este caso, una pizca de intimidad. La combinación entre colores más vivos y brillantes con tonos más neutros como blancos o negros, es una decisión atrevida, pero acertada, ya que añade contraste y luminosidad al espacio. ¿Se puede pedir más?

Un toque tierno

Una cortina se ha hecho no sólo para resguardarnos de la luz natural, sino que también para convertirse en un elemento decorativo que hable alto y claro del estilo que hemos elegido para nuestro salón. Por eso, cada detalle en su diseño ¡cuenta! En el de la imagen, son los volantes en la parte superior y su textura rugosa en color púrpura los encargados de añadir un poco de encanto romántico al salón de casa, y convertirlo en un espacio acogedor en el que apetezca pasar un buen rato.

De dos o más capas

Ni espacios muy recargados de luz, ni espacios que se queden en la penumbra, existen diseños que nos permiten regular a gusto el paso de la luz. Hablamos de las cortinas con barrales dobles, e incluso triples, en las que lo ideal es combinar distintos materiales y modelos para cada capa, de tal forma que no caiga en un diseño monótono. Los detalles bordados se han hecho con todo el atractivo en estas dos cortinas de salón, y para lucirlos como se merecen lo mejor es recoger con sus abrazaderas la cortina exterior. ¡Que todos los detalles queden la vista!

Al más puro estilo glam

De nuestra siguiente inspiración no existe un sólo detalle que pase desapercibido: los tonos metalizados, el barral doble, y esas texturas imposibles en formas de rizos que entran en bucle hasta tocar el suelo. Para contrarrestar la sensación de opulencia de la primera, las cortinas de abajo estás diseñadas con un tejido mucho más fino y discreto, igualmente en tonos grisáceos. Y pasando casi desapercibida, pero igual de importante, podemos observar en el fondo una persiana en colores blancos, para cuando queramos ocultar los rayos de sol en el salón sin necesidad de modificar la postura impecable de nuestras cortinas.

Carnaval de colores

Y aunque los diseños que utilizan telas más translúcidas tienen su atractivo, los más clásicos de tela gruesa también siguen estando presente en la decoración de muchos hogares. Una vez más, estamos ante un diseño lleno de colores y de inspiración mediterránea que garantiza protegernos de la luz cuando el sol pege con más fuerza, y disfrutar de un precioso atardecer de verano, si las abrimos.

Como un reflejo

Cuando se trata de vestir un diseño de ventanas simétricas, definitivamente acertar con las cortinas se convierten en el detalle que acabe por explotar su atractivo. Las de la imagen, de tela fina, y en tonos verde pastel, siguen la línea de color que se consigue junto al sofá, los detalles florales en el techo y la plantas que adornan el salón. Otro detalle que no hemos podido pasar por alto son los remates decorativos colocados en los extremos de cada barra, discretos pero clave para sujetar con precisión a la cortina en su parte superior y evitar que resbale. 

De aires orientales

Las cortinas que caen desde una entrada en forma de arco tumido, se convierten en improvisadas puertas impregnadas de ciertos aires místicos y espirituales. La gran ventaja de este tipo de diseños es que no necesita de ninguna barra o riel para colocarlas, tan sólo de unos sencillos y prácticos enganches que han de repartirse a lo largo del arco. Al recoger las cortinas en sus abrazaderas laterales, creamos una apertura que parece darnos la bienvenida a una estancia sacada de la misma tierra de Aladdin

Todo en uno

Cuando un par de cortinas no son suficientes para cubrir salones muy luminosos, y optar por los diseños de dobles barras, no encaja precisamente con lo que buscamos, aún podemos tirar de una tercera opción: combinar, con algo de gracia y estilo, persianas, cortinas y estores en una misma ventana. ¿El resultado? Espacios tan discretos y sobrios, como el de la fotografía. Al contrario de lo que se pueda pensar, elegir la misma escala de colores para decorar todo un salón, puede ser una decisión de lo más acertada.

Las cortinas de nuestro salón, al igual que el resto de elementos decorativos, han de elegirse pues bajo cierto criterio y reglas. Pero como sobre gustos no hay nada escrito, aquíaquí podrás encontrar más ideas para vestir a tus ventanas. 

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