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La fachada de nuestra casa dice tanto de lo que podemos encontrar en el interior… Muchas veces de forma equivocada. Imagina que tienes un diseño de interiores espectacular en tu casa, pero que la fachada es de todo menos bonita. ¿Crees que tus invitados o la gente que vea tu casa pensará que debe ser bonita?
Las primeras apariencias cuentan. Y eso es lo que queremos que veas hoy a través de este libro de ideas. Te damos 7 propuestas para que tu fachada comience a lucir de una forma completamente renovada, mucho más bonita, llamativa, cuidada.
Dale a tu fachada la nueva vida que se merece y haz que todos se queden con la boca abierta incluso antes de entrar en tu casa. Cada idea es completamente diferente a la anterior pero todas son espectaculares… tanto que te costará decidirte por una.
La piedra es un material tan socorrido para cualquier tipo de fachada y de vivienda… que teníamos que empezar por esta propuesta. En vez de pintarla o restaurarla por completo, ¿por qué no pruebas a revestirla completamente con piedra? Además, ten en cuenta que es un material que queda genial tanto si se coloca en la fachada completa o sólo en partes de la misma: en la zona de la entrada, del porche, alrededor de las ventanas, en la zona superior o inferior de la fachada, e incluso repartida como pequeñas pinceladas.
Esta es una de las propuestas más bonitas y naturales de la lista. Eso sí, no es tan sencilla de colocar como parece. No se trata únicamente de colocar plantas como la hiedra y dejar que crezcan. Debemos informarnos bien antes de llevar este proyecto decorativo a cabo. Por ejemplo, debemos ser sumamente cautos a la hora de impermeabilizar la parte de la fachada por la que van a ir las plantas. Todo con el fin de que no encontremos humedades en el interior de casa. Si sigues todas las recomendaciones de los expertos, será una opción muy gratificante.
Una celosía no es sólo un punto a favor para la fachada. Lo es también para el interior, ya que la zona donde se coloque logrará una mayor y mejor iluminación, además de una ventilación más adecuada. Es perfecta para la zona de la escalera, por ejemplo.
La fachada, por otro lado, se verá mucho más viva y más cálida gracias a este material. Recuerda que la madera elegida para la celosía debe estar perfectamente tratada de cara a las humedades que se puedan producir.
Otra forma de cambiar la estética de la fachada de nuestra casa es colocando un jardín frontal, aunque sea muy pequeñito y sencillo. Basta con colocar unas cuantas plantas, quizás un poco de césped, piedras, y puntos de luz artificial que realcen esta nueva zona de tu casa. La fachada automáticamente se verá mucho más atractiva visualmente, además de dirigir el foco de atención hacia esta nueva y natural zona.
Sí, estás leyendo bien. Hay espejos especialmente pensados para fachadas que puedes colocar en la tuya con total acierto. Te sumarás a un revestimiento que resulta contemporáneo y original. Diferente de todo lo que probablemente haya alrededor de tu casa. Será la más atractiva y llamativa del barrio.
La madera y el metal no son los únicos materiales con los que se puede construir una celosía en casa. También la cerámica es muy socorrida y bonita para este tipo de elementos. La de esta imagen, creada por Volta, tiene un diseño sencillo pero actual, que bien colocado le da a la casa un volumen distinto. Además de, por supuesto, aportar muchísima luz y ventilación al interior.
Hemos dejado para el último punto una de las opciones más factibles y sencillas: volver a pintar la fachada. Puedes hacerlo con el mismo color que tenías hasta ahora, reparando los desperfectos y volviéndole a dar una nueva vida. Pero si realmente quieres que tu fachada luzca aún más bonita… cambia su look por completo y dale un color más atrevido. Parecerá que estás entrando en otra casa. ¡Renovarse o morir!
